Si estás leyendo esto quiere decir que eres una persona apasionada por los videojuegos. Tal vez te ha pasado por la mente el crear tu propio juego inspirado por aquellos títulos de tu infancia. Esos RPG inolvidables como Final Fantasy 7 o Chrono Trigger que te motivaron a contar tus propias historias. Tal vez lo tuyo son los juegos de plataformas como Mario o Rayman y siempre quisiste crear tus propios niveles. O simplemente te gusta desestresarte con unas partidas de Street Fighter con tus amigos y has soñado con crear tus propios personajes para verlos pelear en escenarios alucinantes. Cualquiera que sea tu motivación, si estás en este blog, quiere decir que eres un desarrollador de corazón y que amas jugar. Porque, si eres un desarrollador debes ser un jugador.

Este punto puede ser polémico y algunas personas pueden decir que no es necesario jugar o gustarte los juegos para poder crearlos. Pero ¿acaso has visto a un escritor que no le guste leer o un director que no pase la mitad de su tiempo consumiendo buen cine? creo que la respuesta es clara. Usualmente un creativo de cualquier índole es un consumidor ávido del medio en el que se quiere desenvolver. Es por eso que te invito a que tu seas un diseñador o creador de juegos que tiene el buen hábito de probar los grandes juegos de ayer y hoy.

Parece mentira pero en Trashbot nos hemos topado con personas que dicen querer dedicarse al desarrollo de juegos indie y se quedan callados cuando les hemos preguntado cuáles son sus juegos favoritos. Si alguno nos contesta Tetris o Pac-Man ya es una victoria. Pero, ¿por qué insistimos tanto en que un buen desarrollador debe probar una cantidad importante de juegos en su día a día? Lo explico a continuación.

Jugar alimenta tu arsenal creativo

Así como los artistas deben constantemente llenar su mente con práctica de anatomía, color y composición, los desarrolladores debemos estar al tanto de los recursos que usan otros artistas en sus juegos. Debemos estar en contacto con las nuevas tendencias de diseño y desarrollo. Un programador o diseñador que no juega regularmente va a estar siempre sujeto a lo que a él o ella le parece que es lo mejor. Ignorando las tendencias del mercado actual y cayendo en errores desastrosos como le ocurrió a SquareEnix con la primera versión de Final Fantasy XIV.

Este título salió a la venta sin ninguna investigación de mercado sobre las nuevas tendencias en los MMORPG. Es más, ninguna de las personas involucradas en el desarrollo había jugado en su vida otra cosa que no sea Final Fantasy, ignorando todas las facilidades y mecánicas a las que los usuarios estaban acostumbrados a usar en juegos como World of Warcraft. El resultado es de conocimiento público, un juego que fracasó espectacularmente y que tuvo que ser reconstruido desde el inicio en tiempo récord y que puso en peligro las finanzas de la empresa. Noclip hizo un documental completo al respecto.

Así que queda claro que estar al día con lo que ocurre en el mundo de los juegos es de suma importancia

Jugar te hace encontrarte a ti mismo

Solo experimentando con diferentes títulos para diferentes plataformas podrás conocer lo que te gusta y lo que no. Es verdad que los creadores debemos estar al tanto de cómo funcionan los diferentes géneros que hay en el mercado, pero no significa que todos nos deban gustar. Solo cuando has experimentado una cantidad considerable de juegos te darás cuenta de qué es lo que realmente te mueve. Te darás cuenta de qué es lo que realmente quieres crear, o si quieres crear algo en primer lugar. Porque a lo mejor te das cuenta que el desarrollo no es lo tuyo, y eso está bien. Lo peor que puedes hacer es dedicarle horas y días enteros a hacer algo que en el fondo no te llena. El desarrollo de juegos es una tarea muy compleja y sólo deberías dedicarte a ello si es algo que de verdad te apasiona y por lo que estás dispuesto a sacrificar tu tiempo y energía.

Juega como un desarrollador

Pero ¿qué quiere decir jugar como un desarrollador? Pues quiere decir que cuando decidas empezar a jugar algún título estés atento a todos los detalles.

Pon siempre atención a cómo inicia un juego, cómo se instaló, cuánto pesa en tu disco duro o en la consola. Cómo se desarrolla la secuencia de inicio, los títulos, los logotipos que aparecen. Por qué aparecen esos logos. De qué opciones está compuesto el menú principal, cuales son las configuraciones que ofrece. Todo lo que tenga que ver con su funcionamiento, a detalle, desde el inicio hasta donde decidas jugar. Ya que es probable que no los termines todos, tampoco es una obligación. Pero si es bueno que lo juegues hasta un punto donde tengas una idea muy clara de todos los sistemas que contiene y como interactúan entre si.

Una vez dentro del juego pon atención al entorno, los movimientos del personaje. Trata de deducir por qué las cosas son como son. Por qué no puedes ir a ciertos lugares, por qué no puedes interactuar con todos los objetos del entorno. La cantidad de munición que encuentras en el escenario. Por qué los enemigos de un juego de plataformas se mueven en determinada forma y por qué no en otra. Ponte en la mente de los desarrolladores y aprende de sus decisiones. Más allá de las quejas que podamos tener los usuarios, los creadores tratan siempre de ofrecer la mejor experiencia en base a sus limitaciones, sean estas económicas, técnicas o de tiempo. Así que las decisiones que a nosotros nos parecen ilógicas pueden tener su origen en dichas limitaciones.

Y qué debo jugar

Todo lo que puedas. No te limites a un solo género, ya que podrías aprender mucho jugando algo muy diferente a lo que estás acostumbrado. Tal vez la solución a el sistema para almacenar items ideal para tu RPG provenga de un Shooter en primera persona. O el estilo gráfico de tu juego de peleas esté influenciado por un clásico de PlayStation.

La inspiración puede venir, y vendrá, de donde menos esperas.

Para finalizar cabe mencionar que tampoco es necesario comprar cientos de juegos. Hay infinidad de demos gratuitos y descuentos en todas las tiendas digitales. Epic Games Store ofrece varios juegos gratuitos cada semana. Steam tiene rebajas de hasta el 90% y Good Old Games tiene clásicos a precios menores de $5. Así que no tienes excusa, ve y empieza a jugar y a analizar.

Hasta la próxima.